Sala de parto

Ser docente es un parto en muchos sentidos: damos a luz, nos duele, nos ponemos contentos, lloramos, nos reimos, no tenemos idea qué nos está pasando, nos hacemos cargo, no queremos hacernos cargo, pero ante todo lo disfrutamos...
Por eso, celebremos la creatividad de esos alumnos que no tienen la más pálida idea, alumnos que miran la hoja de un examen y se preguntan muchas cosas y responden tantas otras que nunca alcanzamos a comprender (pese a que el examen lo hicimos nosotros y es de la materia que se supone sabemos mucho...) Celebremos el esfuerzo de la imaginación y compartamos la dicha de una corrección hogareña que nos depara un universo nuevo de conocimientos completamente desconocidos para la humanidad.

Salud y que nos aproveche.